El vacío de liderazgo social

02.05.2013 10:52

Hace unos días escuché en la radio una entrevista con la política Luisa Fernanda Rudi, presidenta de la Comunidad de Aragón. En esa entrevista la Sra. Rudi apuntó una idea que me pareció muy interesante. Dijo algo así como que los políticos hoy en día no son capaces de transmitir esperanza ni ánimo a la sociedad. Y eso me hizo reflexionar sobre un problema mayor: la falta de líderes que, en tiempos difíciles, sepan mantener la ilusión en las personas. Efectivamente creo que estamos ante un vacío en el liderazgo social y político que nos ha generado esa gran desconfianza en la clase política (o viceversa, la desconfianza en la clase política lleva al vacío de liderazgo).

Desde luego la desconfianza en la clase política, es algo que los mismos políticos se han ganado a pulso (hablo en términos generales, claro) a base de corruptelas, sobres, sobresueldos y cosas así. Pero también ha contribuido el que la sociedad no perciba a los políticos como líderes, sino simplemente como políticos.

Y, en los tiempos que vivimos, se hace necesario liderazgos y líderes carismáticos, que, además de buenas ideas, y talante cooperativo, tengan capacidad de ilusionar, de dar esperanza, de generar optimismo (eso sí, sin vender parcelitas en el cielo o cortinas de humo).

Si, en lugar del pesimismo generalizado en el que nos han metido, fueran capaces de, desde el realismo, insuflar un poquito de esperanza, nos sentiríamos mejor, además de confiar en quienes toman las decisiones al más alto nivel.

Y esto contribuiría a una mejora en el manejo del stress al que estamos sometidos todos los días cuando vemos las noticias.

Cada vez estoy más convencida que una sociedad unida, y apoyada sobre buenas ideas, buen liderazgo y optimismo, es la sociedad que avanza. Y esto es, en gran parte, responsabilidad de dirigentes y políticos.